EL CATEQUISTA VIVE Y SE ALIMENTA DE LA PALABRA DE DIOS
El catequista es aquel vive y se alimenta de la Palabra de Dios (Cf. Mt 4, 4).
Por eso:
- No se contenta con leerla, ni orla, sino que la medita asiduamente, extrayendo de ella lo mejor para ponerla en práctica (Cf. 1º SAT 1, 21-25 Mt 7, 21-27)
- Está abierto a la Palabra dejando que llegue al fondo de corazón (Hb 4, 1-11)
- Revisa su vida a luz de la Palabra (Cf. 2ª Tm 3, 14-1)
- Acepta la Palabra como norma y criterio de vida (Cf. Jn. 14, 23-24)
Te proponemos a continuación un esquema que puedes utilizar en forma personal o cumunitaria para tener un espacio de oración a partir de la Palabra de Dios.